Este es el tercer artículo de la serie, (aquí tienes el primero y el segundo, por si no los has leído). A estas alturas ya deberías estar viendo la verdura como algo más cercano y con muchas posibilidades de ser algo cotidiano en tus platos. Así que vamos a por la última tanda de ideas para completar el impulso.
A menudo me encuentro con
personas que sienten un rechazo frontal a la verdura porque la imagen que
tienen en su mente corresponde a unas acelgas hervidas o a una aburrida ensalada
con lechuga iceberg. En suma, desconocen la innumerable cantidad de
posibilidades que ofrece la verdura en la cocina.
Sin complicarse la vida y partiendo de lo más asequible, mi propósito con estos artículos es dar más relevancia a las verduras en la alimentación diaria de una manera sencilla.
TERCERA PARTE
🍲 Haces
albóndigas o hamburguesas en casa? Añádeles verdura, puede ser
cruda o si prefieres no percibir su textura al masticarla puedes saltearla primero,
antes de mezclarla con los otros ingredientes. Ponle calabacín,
calabaza, zanahoria, espinaca, brócoli rallado, kale,…
🍲 ¿Eres
de los que hacen desayunos poco tradicionales? Pues
hazte una tostada con tomate, pepino, aguacate, hojas tiernas de espinacas y
germinados. Esto mismo también puede servirte para un revuelto tipo inglés con
pimienta pero que incluya estas verduras. No olvides acompañarlo de una bebida
caliente, un té, por ejemplo.
🍲 Seguro
que te gusta la tortilla de patatas. La has probado con dados de
calabacín? Si prefieres ir más rápido con una mandolina puedes cortarlos en rodajas finas. No hace falta que los cocines demasiado, rehogados y tapando la
sartén se hacen enseguida. Ten en cuenta que soltarán un poco de agua y puede
que los tengas que escurrirlos antes de mezclarlos con el huevo. Debido a la textura del calabacín, la tortilla
quedará siempre jugosa.
🍲 ¿Y
los chips de verduras? Los reyes son los de Kale, algo
superdelicioso, pero también puedes hacerlos con otras verduras como calabacín,
calabaza, nabo, zanahoria, chirivía y remolacha, cortadas en láminas con la
mandolina. Hay varias formas de
prepararlas:
- Al horno, puedes macerarlas previamente si lo prefieres o ponerlas directamente en la bandeja, bien distribuidas durante unos 20 minutos a 120ºC. Es conveniente vigilarlas porque cada verdura necesita un tiempo determinado.
- A la sartén, para ello lo mejor es rebozarlas en una mezcla de harina (de grabanzo o arroz) + especias + sal con el truco de la bolsa (metes las verdura con todos los ingredientes, la agitas como si fuera una coctelera y verás cuando las saques, que están listas para freír). Después de fritas debes dejar que escurran sobre papel de cocina. Una vez secas quedan muy crujientes
- Deshidratadas. Necesitarás una deshidratadora o en el horno a 50ºC con la puerta entreabierta durante varias horas. Puedes ponerlas tal cual o bien con el mismo truco de la bolsa darles un toque de especias.
🍲 Te
gusta “dipear”? Es decir, mojar algún alimento en una salsa
para comerlo como aperitivo o para picar entre horas. Que mejor que hacerlo con
verdura!!! Te recomiendo estas salsas: de remolacha, de pimientos asados, el
guacamole y el clásico hummus. Tómalas con crudités, tiras finas de verduras
crudas como pimiento rojo, o amarillo, zanahoria, pepino, apio, endivias,
rabanitos, tomates cherry, incluso florecitas de brócoli.
🍲 Un
plato muy vistoso. Cuscús de brócoli o coliflor. Tan sencillo
como poner las florecitas de estas coles en el procesador de alimentos hasta
que queden unas diminutas bolitas que asemejan cuscús. Después solo te queda cocinarlo
a tu gusto, por ejemplo al vapor (dentro de una gasa para que no se esparzan), saltearlo
o tomarlo crudo. Todo depende de la textura que prefieras. Añádele otras
verduras, un buen aliño y sorprende a tu familia.
🍲 Ratatouille.
¿Recuerdas
la película? La verdad es que es un plato muy colorido y sabroso. El éxito
reside en la salsa que pongas de fondo, tomate + pimiento rojo + ajo +
especias. Sobre esta salsa pones las rodajas de calabacín, berenjena, tomate, (yo
pongo también calabaza y nabo) le pones un poco más de salsa y especias por encima y lo
metes al horno 45 minutos a 180ºC.
🍲 Salsa
bechamel para tus gratinados. Está hecha con coliflor, si, has leído bien, de coliflor y es realmente
sorprendente: Solo has de pochar cebolla, añadir la coliflor cortada en pequeñas
florecitas y un fondo de leche de arroz. Tapar y cocer a fuego medio durante
unos 15 minutos. A continuación le pasas la batidora y le añades pimienta, nuez
moscada y levadura nutricional (a elegir, aunque yo recomiendo ponerlas todas porque
le dan un toque especial). Para darle un poco más de cremosidad se podría
añadir harina de almendras o bien anacardos (previamente remojados durante 3-4
horas y triturados). ¡¡¡Ya lo tienes listo para gratinar, sobre verduras hechas al wok o sobre canelones de verduras!!!
🍲 Chop
suey. No es más que un plato de verduras cortadas en tiras y salteadas
con brotes de soja o bambú. Recomiendo poner
un poco de jengibre rallado y salsa de soja al final, que le da ese toque
asiático al plato. Se suele preparar con
carne pero puedes hacerlo con tofu, soja texturizada o seitán que debes cocinar
antes de añadir las verduras.
➽ No
te olvides del postre. Hay recetas maravillosas de tartas, cupcakes
y madalenas con calabaza, boniato o zanahoria que necesitarán poco o nada de azúcar
y son sorprendentemente deliciosas.
Ahora empieza tu aventura, seguir indagando, probando, preguntando y ajustando los platos de verduras a tus necesidades
y gustos.
Te recomiendo que no te
pierdas el último artículo de esta serie. Te aportaré unos cuantos consejos
para hacer más fácil este camino hacia el objetivo: “verdura en cada plato”
Si
quieres volver a leer los artículos anteriores:
Las mejores ideas para comer más verdura I (lo más sencillo…)
Las mejores ideas para comer más verdura II (un paso más...)
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