La información nutricional es opcional,
solo es obligatoria en aquellos productos que aleguen propiedades nutritivas, es decir, que en el envase del alimento haya un
mensaje que le atribuya, de forma explícita, propiedades determinadas. En este caso los
nutrientes a los que hace mención deberán expresarse pormenorizadamente en la
etiqueta. Está prohibido otorgar al alimento propiedades curativas.
Para los consumidores es interesante conocer esta información ya
que podemos valorar el contenido en nutrientes, vitaminas, minerales, fibra y
la cantidad de calorías que aporta, y de esta manera saber qué alimentos
podemos tomar diariamente y cuales ocasionalmente.
Saber leer la información
nutricional puede hacernos cambiar de idea respecto a un
producto que creíamos saludable y nos puede ayudar a elegir el que más nos
conviene, dejando a un lado los mensajes de la publicidad que nos bombardea diariamente.
Lo primero en lo que hay que fijarse al mirar la etiqueta es como está
referida la información, es decir, a una
ración o a 100 gramos. Por ración resulta más fácil de comprender y
aplicar.
Cuánta información aporta el etiquetado nutricional:
La más sencilla, en la que aparece el valor energético y la cantidad
de proteínas, hidratos de carbono y grasas.
La más completa: Igual que la anterior pero desglosa los tipos de
hidratos de carbono y los tipos de grasas y además añade el contenido en fibra
y sodio.
En ambos formatos se pueden
añadir datos complementarios sobre colesterol, vitaminas, etc.
Otro dato que también podemos
encontrar, en forma de porcentaje, es la cantidad de determinados nutrientes en
función de la CDR (cantidad diaria recomendada). Esto nos indica qué
porcentaje, del total destinado a un día, estaremos tomando de un determinado nutriente
por ración. Esta información es especialmente útil en hipertensos, diabéticos,
para los que tengan el colesterol alto y para los que quieren perder peso.
Las CDR hacen referencia a las
calorías, las grasas, los azúcares y sodio. Para el resto de nutrientes
(hidratos de carbono, proteínas y fibra) es opcional.
IMPORTANTE: Estos porcentajes se han de tomar como
cifras orientativas, no como cantidades estrictas, ya que están referidas
a necesidades básicas para adultos mayores de 18 años con un peso normal, pero
no tienen en cuenta otros aspectos como el sexo, la edad, el peso, el
ejercicio, etc.
Cómo se aparece la información nutricional en los envases?
Actualmente podemos encontrar en el mercado 2 maneras de presentar la información nutricional:
Actualmente podemos encontrar en el mercado 2 maneras de presentar la información nutricional:
En ambos casos la información es
la misma.
En la tabla nutricional los
datos se presentan en un cuadrante en el que se van desglosando las cifras. Esto supone tener unos conocimientos mínimos sobre nutrientes para valorar los datos que se aportan.
En el semáforo nutricional
se representa en horizontal, pero añade además la utilización de colores:
El color rojo para aquel nutriente que se encuentra en un porcentaje superior al 20% dela CDR en una sola
ración.
El color amarillo el porcentaje es medio.
El color verde es por debajo del 7,5%.
Este método es más sencillo de comprender para todo el mundo.
El color rojo para aquel nutriente que se encuentra en un porcentaje superior al 20% de
El color amarillo el porcentaje es medio.
El color verde es por debajo del 7,5%.
Este método es más sencillo de comprender para todo el mundo.
Cómo debemos interpretar
los colores:
El color rojo no quiere decir que no se puede tomar ese alimento sino que deberás tener en cuenta que ya has tomado la cantidad diaria recomendada de ese nutriente.
Pongamos por caso la sal. Si vas a tomar un alimento que superala CDR (en rojo) y eres hipertenso el resto del día
deberías anular la sal. O bien elegir otro alimento que te permita repartir la CDR durante el día de una manera más equilibrada.
El color verde no ofrece limitaciones y el color amarillo indica que habrá que ir sumando a lo largo del día para no pasarse.
Cómo elegir
Cuando nos encontramos en la disyuntiva de tener que elegir entre varias opciones, yo suelo recomendar:
El color rojo no quiere decir que no se puede tomar ese alimento sino que deberás tener en cuenta que ya has tomado la cantidad diaria recomendada de ese nutriente.
Pongamos por caso la sal. Si vas a tomar un alimento que supera
El color verde no ofrece limitaciones y el color amarillo indica que habrá que ir sumando a lo largo del día para no pasarse.
Cómo elegir
Cuando nos encontramos en la disyuntiva de tener que elegir entre varias opciones, yo suelo recomendar:
- Olvidarnos de la propaganda y publicidad y valorar si realmente necesitamos ese alimento.
- Si queremos saber lo que contiene lo primero es leer la lista de ingredientes (como dije en el post anterior) y comprobar que solo lleva sustancias conocidas.
- Después ya puedes leer la composición nutricional, nunca antes, ya que una composición nutricional puede resultar adecuada pero tener una lista de ingredientes poco recomendables.
Ánimo! Con un poco de práctica,
esta tarea que parece tan pesada, se convierte en una rutina que te permitirá
elegir con un criterio saludable los alimentos.
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- Leer etiquetas 3: azúcar, grasas y sal
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Muy buena información la que das,deberíamos leer mas y mejor las etiquetas.
ResponderEliminarYo suelo hacerlo y como tienen la letra tan pequeñita, ya estoy tomando la costumbre de echar las gafas al bolso.
Muchas gracias Chary, me alegro de que resulte útil.
ResponderEliminarTienes toda la razón la letra la hacen realmente pequeña y en ocasiones hay que dar varias vueltas al envase para encontrar la información (estrategias disuasorias)
Participa siempre que quieras
Saludos